Jóvenes de todas las fuerzas políticas se enfrentan a las medidas del intendente de General Pueyrredon
Desde que asumió su cargo en diciembre de 2015 el intendente de General Pueyrredon, Carlos Fernando Arroyo, no ha dejado de ser noticia. No han sido los logros de su gestión los que lo han llevado a los titulares, sino más bien todo lo contrario. Lo que ha caracterizado a uno de los más importantes intendentes de la coalición Cambiemos en la provincia de Buenos Aires ha sido su conducta errática y sus intervenciones desacertadas. Sumado a sus cuestionados antecedentes, Arroyo ha demostrado una gran impericia para gobernar, lo que a poco más de un año de iniciado la gestión le ha costado la renuncia de decenas de funcionarios de su gabinete. «Eso no es fascismo, es inutilidad. Arroyo no tiene cintura política, no resuelve» sentenciaba el periodista Agustín Marangoni hace algunos días en un lapidario análisis desde su Facebook personal.
Tras sus poco felices palabras sobre la violencia de género, en esta oportunidad Arroyo ha cargado contra los jóvenes, objetivo privilegiado de su política prohibicionista. Fue justamente a raíz de los intentos del intendente de prohibir las fiestas electrónicas en Mar del Plata, que referentes de las juventudes de distintos sectores políticos se reunieron este jueves para expresar su rechazo esta medida puntual y, al mismo tiempo, ejercer una crítica general a la gestión.
Con una convocatoria amplia y plural, dirigentes juveniles de Acción Marplatense, Libres del Sur, el Frente Renovador, Nuevo Encuentro, GEN, Socialismo, Movimiento Atahualpa, Unidad Popular y La Cámpora, entre otros, señalaron en conferencia de prensa: “hay una idea de estigmatizar y criminalizar a los jóvenes, en lugar de tratar toda la problemática de fondo”.
Pablo Zelaya Blanco, integrante de la Juventud Socialista señaló al portal digital El Retrato de Hoy: “Tenemos cierto malestar y preocupación, con respecto a las políticas que se toman con los jóvenes”. Asimismo, manifestó que “hay una idea de estigmatizar y criminalizar a los jóvenes, en lugar de tratar toda la problemática de fondo” y, en ese contexto, señaló que con ese objetivo se reunieron prácticamente todas las juventudes políticas de Mar del Plata. Por otro lado, uno de los integrantes de la Juventud de Acción Marplatense –partido que gobernó el municipio desde 2007 hasta la asunción de Arroyo-, sostuvo: “La primera medida que tomamos fue juntarnos” y añadió que se viene trabajando desde mitad de año en la constitución de una mesa de juventudes.
Finalmente, el representante de la Juventud Socialista Pablo Zelaya Blanco afirmó que “hay una estigmatización general de la juventud que parte también por no poder tratar el problema: entonces lo más fácil es estigmatizar y mostrar a los jóvenes como el problema”. “Creemos que es importante trabajar en políticas públicas de fondo y no esconder el problema debajo de la alfombra” concluyó el dirigente socialista.
Los convocados anunciaron que esperan que primeramente el gobierno municipal haga una convocatoria a las juventudes para tratar éste tipo de problemáticas. En tal sentido, explicaron: “Hace 6 meses que nos venimos juntando, que saben que existe esta mesa conformada y lo que se hace es prohibir espacios, donde los jóvenes se recrean, en lugar de convocarnos a ver como en conjunto podemos tratar las problemáticas”. “El diálogo entre el gobierno municipal y los jóvenes sería el primer camino para destrabar este conflicto” concluyeron.
Como advertía el periodista de La Capital Agustín Marangoni: «Es momento de entender que la inutilidad en la gestión pública es una de las peores formas de corrupción». Los jóvenes han alzado su voz al respecto y esperan respuestas.
Fuente El Retrato de Hoy
