El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, y su canciller, han asegurado que México no pagará el muro que Trump pretende erigir en la frontera.
El hasta ahora temeroso y tibio presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, acabó cancelando la reunión con el mandatario norteamericano, Donald Trump. La decisión fue tomada luego de que Trump anunciase de manera oficial la construcción de un muro divisorio en la frontera con México, una de sus más criticadas promesas de campaña.
Peña Nieto no había mostrado, hasta el momento, una posición lo suficientemente hostil hacia Donald Trump, pero finalmente decidió cancelar la reunión que sostendría con el presidente estadounidense el día 31 de enero en Washington.
“México no cree en los muros. Lo he dicho una y otra vez: México no pagará ningún muro”, afirmó Peña Nieto en su mensaje. Sin embargo, afirmó que su país desea «seguir trabajando con Estados Unidos en beneficio de ambas naciones».
El canciller de México, Luis Videgaray, se manifestó, a posteriori, en el mismo sentido que Peña Nieto. «Hay temas que son (inaceptables) por dignidad, que no tienen que ver con las exportaciones o la economía, sino con el corazón y el orgullo de los mexicanos» – sostuvo.
Con un tono muy moderado, Videgaray afirmó: «Reconocemos en Estados Unidos una nación soberana con pleno derecho a proteger sus fronteras conforme lo decida el pueblo y el Gobierno. No coincidimos en que el muro sea la mejor manera de proteger o generar una buena convivencia entre vecinos, pero pueden defender sus fronteras como mejor les parezca».
Finalmente, y aumentando algo el tono de su replica, dijo que aunque reconoce la soberanía norteamericana en materia migratoria, «pretender que sea el pueblo de México el que pague por un muro es pasar de una acción soberana a algo que es profundamente inaceptable».