Anuncian que en Susques, en algo más de un año, se instalarán un millón y medio de paneles solares, en la que será la planta fotovoltaica más grande de Sudamérica.
Dejando atrás Purmamarca y atravesando las Salinas Grandes se llega a Susques, enclavada justo en el taco de la bota de la Provincia de Jujuy. En este punto del norte argentino, a 4.000 metros sobre el nivel del mar, una planta solar ocupará allí 360 hectáreas (algo así como 500 canchas de fútbol) y costará 410 millones de dólares, que serán financiados por un banco chino.
Según se anuncia, la construcción de la planta se iniciará en estos primeros meses de 2017. Las obras demorarían un año y un mes, y poco tiempo después estarían funcionando los paneles policristalinos de células fotovoltaicas de silicio, las encargadas de tomar la energía del sol para convertirla en energía eléctrica.
«Cauchari I, II y III» tendrán una potencia pico de 300 MW anuales. En una primera etapa la energía se venderá al sistema interconectado nacional, ya que la licitación incluyó un contrato comercial con la distribuidora Cammesa, que garantiza la compra de energía durante 15 años a un costo de 60 dólares el MW. Se espera que más adelante autoabastezca a la provincia.
La Puna recibe unas 3.400 horas anuales de luz solar, lo que equivale a más de 9 horas diarias promedio. El cielo es siempre azul, y el antiguo poblado en el que ni siquiera los conquistadores españoles se atrevieron a asentarse por las condiciones adversas, está sumergido bajo los rayos del sol.
La clave en Puesto Sey es su capacidad de transporte. «Cuando se genera energía es muy importante tener cómo transportarla, porque si no todo se complica. Acá teníamos una línea de transporte que pasa por el sur de Susques, justo en el límite con Salta», explica Alejandra Cau, directora de Desarrollo de Energías Renovables provincial.
«Gozamos de una enorme disponibilidad del recurso solar, tenemos una de las mejores irradiaciones del planeta. La estrategia es generar desarrollo en una provincia que se sostiene con recursos primarios como el tabaco, el azúcar y el litio», detalla. Intentarán cobrar, como se dice, las «regalías del sol».
[blockquote author=»» pull=»normal»]La planta promete llevar a un 8 por ciento la producción de energía renovable de la matriz nacional.[/blockquote]
«Es una asociación público privada de la estatal Jemse (Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado) con tres empresas chinas: Power China, Shanghai Electric y Talesun. Ellos fabricarán los módulos fotovoltaicos y harán la operación y mantenimiento. El banco Eximbank, también chino, nos dará 100 por ciento del financiamiento», detalla la funcionaria.
El objetivo de largo plazo es consolidar un «Parque solar y geotérmico de la Puna» con capacidad de generar hasta 1.500 MW, que podría abastecer el consumo anual de unos 350 mil hogares. En esa proyección aparece la posibilidad de aprovechar la energía geotérmica del volcán Tuzgle, una de las atracciones del paraíso pedregoso de Sey. Pero todo lleva sus estudios previos. Así como debió realizarse un mapeo con satélites europeos y de la NASA para medir el recurso solar, para comenzar a perforar las proximidades del volcán habrá que tener datos concretos, ya que cada perforación cuesta un millón de dólares.
Por otro lado, Martín Altamirano, doctor en energía renovable e integrante del equipo técnico de la Secretaria de Energía de la provincia de Jujuy especificó que, inicialmente, está previsto un trabajo en paralelo para la instalación de la subestación, el montaje de los paneles y la nivelación del terreno.
Shanghai Electric tendrá a su cargo la construcción de la planta desde los aportes técnicos que van hacer. Talesun Solar, por su parte, va a proveer de los paneles solares.
Dado que se estima que será necesario colocar más de un millón de paneles, no se descarta la posibilidad de instalar una planta de ensamblajes en la provincia.
«Esta planta va a abastecer más del 60 % de lo que consume Jujuy», puntualizó y agregó, «queremos llegar a un 8% de producción de energía renovable de la matriz nacional».
Un objetivo clave es llegar a generar 600 Mw, razón por la cual se comenzó a trabajar en la segunda ronda de licitación nacional.
«Lo que se licitó es un contrato de compra de energía a 20 años. Hemos puesto un precio muy competitivo pero que permitirá que el proyecto se sustente por sí solo. El crédito se paga desde el mismo proyecto y generará ganancias a la provincia», finalizó.
La instalación de las tres plantas abarcará aproximadamente 360 hectáreas y generará puestos de trabajo para alrededor de 600 personas en el transcurso de los próximos años con toda la infraestructura y movilidad que esto implicará.
«La idea es contratar mano de obra de la Puna», detalló, a la vez que indicó que va a haber mano de obra especializada y técnicos capacitados. El gobierno y especialmente los vecinos de la zona esperan con esto poder abaratar los costos y hacerlo a través de alternativas renovables, apostando a un futuro distinto en la generación de energía.