Andrei Karlov, embajador ruso en Ankara (Turquía), murió tras recibir una serie de disparos mientras pronunciaba un discurso en la exposición de fotografías «Rusia vista por los turcos». Un atacante, que según propias fuentes rusas podría pertenecer a una organizador yihadista, levantó su revolver y comenzó a disparar al embajador, que murió tiempo después. Otras tres personas resultaron heridas y el atacante fue finalmente abatido. El agresor había ingresado al Centro de Arte Contemporáneo disfrazado de guardia de seguridad.
Según últimas informaciones, el asesino sería el policía turco Mevlut Mert Altintas, nadido en 1994.