El Gobierno Nacional ha propuesto un decálogo de medidas a ser presentada en el mes de mayo en la provincia de Córdoba, las que califican como necesarias para superar la crisis por la que se encuentra atravesando el país. Descontada la adhesión de los gobernadores, el documento intenta convertirse en un hito fundacional para la administración encabezada por Javier Milei.
La nueva derecha se centra en el lenguaje, el objetivo de todo mensaje del gobierno es minar el consenso democrático. Cambiar la denominación del salón de las mujeres un 8 de marzo no sólo es una provocación, es una muestra de autoritarismo tanto como burlarse de aquellos que se quedan sin trabajo después de eliminada una repartición estatal.
Se concibe al Estado como un estorbo, que impide el correcto funcionamiento del mercado. Pero tal visión tergiversa la realidad, pues tal retirada favorece a los más actores más poderosos. Dicha aseveración puede encontrarse en un informe reciente del Fondo Monetario Internacional, el cual destaca cómo el creciente poder corporativo esta transformado la dinámica de fijación de precios, el poder que detentan las grandes empresas induce una mayor inflación.
Lejos de lo que plantea la teoría, los precios que fijan estas, no reflejan sus costos marginales. Participantes de mercados “apañados”, los empresarios obtienen ganancias extraordinarias. El poder económico otorga influencia, los empresarios ejercen su poder para introducir o modificar leyes, obtener subsidios, se aseguran rentas extraordinarias. Considérese sino los beneficios que goza Mercado Libre, con exenciones impositivas superiores a los 100 millones de dólares anuales, Marcos Galperin ha devenido en un cruzado libertario.
Pese a todo, el gobierno ha logrado reducir gastos, mostrando, en el primer mes del año, superávit fiscal a partir de la licuación de jubilaciones y pensiones. También se observa una drástica caída en las transferencias asistenciales, comedores populares que se quedan sin raciones. Dicho sendero implica un alto costo social, política insostenible hasta para el mismo Fondo. La austeridad, por cierto, no afecta a todos en igual medida, si observamos los recortes vemos que la “casta” sigue ganando a costa de la sociedad.
LA LEY DE LA SELVA
La nueva derecha exacerba también el afán de lucro que tracciona el sistema capitalista, el mercado dictamina la supervivencia del más apto. Tal lectura simplista de Charles Darwin desconoce la evolución experimentada por las ciencias biológicas, cuya comunidad científica ha demostrado cómo coexisten comportamientos competitivos y cooperativos en la vida animal. La supervivencia en la selva contiene una mezcla de egoísmo y altruismo.
También los individuos se comportan de manera altruista, desde la psicología se evidencia las razones de tal comportamiento. La psicología del altruismo se remonta al siglo XVIII, con pensadores como Adam Smith y David Hume que planteaban una visión moral, una ciencia de la naturaleza humana que reconociera la cooperación, la reciprocidad, la simpatía tanto como la empatía, en fin, una teoría que pretendía explicar los sentimientos morales que posee la gente (aspectos luego denegados por la teoría neoclásica, que considera al hombre como un ser egoísta) visión simplista que actualmente resulta cuestionada por numerosos sectores de la academia.
Estos son sentimientos que solidifican a una sociedad, generan confianza en la ciudadanía en su gobierno, lo que viabiliza el funcionamiento del sistema político. La empatía con los más desposeídos, con aquellos afectados por las inundaciones, incendios u otros fenómenos naturales, lo que debería guiar las decisiones públicas.
DESAMPARO FRENTE AL CAMBIO CLIMÁTICO
Consideremos el violento temporal que afectó a la ciudad de Bahía Blanca la noche del 16 de diciembre de 2023. Este evento meteorológico extremo terminó con la vida de 13 personas, al tiempo que ocasionó cuantiosos daños materiales, distintas zonas de la ciudad quedo asemejada a una zona de guerra. O las inundaciones generadas por la caída de 300 milímetros de agua en menos de 5 horas en la ciudad de Corrientes, otro evento extremo que terminó con voladuras de techos, caída de postes, y otros daños que requieren de trabajos de reconstrucción, gastos que la mayoría de las familias afectadas no pueden afrontar.
Estos ejemplos hablan de una nueva realidad, donde la emergencia climática plantea nuevos escenarios, lo que amerita revisar presupuestos, nuevas políticas púbicas donde las decisiones consideren aspectos de resiliencia, además de respetar la búsqueda de eficiencia en la compras e inversiones que realiza el Estado.
Al momento del debate, las cámaras legislativas deben considerar esta nueva realidad, discutir la creación de fondos extraordinarios, pues ningún gobierno puede desligarse de la suerte de su gente. En los casos citados, pese a lo terrible de la situación y a la desesperación de la gente, la inacción del gobierno nacional fue total y absoluta. Los libertarios creen que los bahienses deben arreglarse por sí solos, idéntico mensaje cabe a quienes fueron afectados por las inundaciones de Corrientes.
LA CRUELDAD COMO ESTRATEGIA
No existe empatía, no se profesa la solidaridad con aquellos que sufren, el accionar del gobierno nacional obedece otro tipo de lógica. Aunque dramático, lo vivido en Corrientes o Bahía Blanca no obliga al gobierno a solucionarlo. Menos solidaridad despierta el sufrimiento de quienes se quedaron sin trabajo, o quienes no tienen que comer.
Para quienes analizan la realidad desde un extremo, los problemas que afronta el común de la gente terminan denotando una muestra de debilidad, comportamiento que debe ser denostado. Nos enfrentamos a un presidente que pone un “like” a quienes se mofan de la suerte de los desposeídos, comportamiento que demuestra insensibilidad, desnuda también odio y resentimiento, sentimientos que común en los partidarios de la extrema derecha.
ARGENTINA SERÁ EXTRACTIVISTA O NO SERÁ NADA
Javier Milei quiere refundar la Argentina sobre nuevas bases, los 10 puntos que declama como fundacionales representan el triunfo de un proyecto de país para pocos, que deja detrás toda solidaridad con los que menos tienen. Más allá del componente fiscal, el documento también denota el abandono de todo cuidado, aunque mínimo, que se ha tenido con el medio ambiente. Como lo han demostrado otros gobiernos de extrema derecha, Javier Milei desconoce el cambio climático.
Los fenómenos aquí descriptos, sin embargo, muestran como lo climático afecta a un número creciente de compatriotas. El Gobierno Nacional llama a las provincias a avanzar con la explotación de los recursos naturales, desconociendo los escasos beneficios, pero altos costos (ambientales y sociales) que impone el modelo extractivista, ciertamente, uno de los puntos donde el consenso político resulta elevado.
Considérese si no, la receptividad que existe en muchos legisladores para avanzar la derogación de la ley de glaciares, o el desinterés de las cámaras para avanzar con la ley de humedales.
Los libertarios argentinos también desconfían de la democracia, cuestionan sin tapujos cualquier atisbo de Estado de Bienestar. El anti-estatismo es furioso, al menos los mafiosos muestran códigos como llegó a plantear en el pasado. Los libertarios muestran también una visión naïve del comercio global, el manejo de las relaciones internacionales resulta infantil, cediendo activos estratégicos a empresarios extranjeros sin obtener nada a cambio. La gente sufre, los mercados están de fiesta.
Para la extrema derecha que gobierna, la expansión del derecho a voto representa el inicio de la decadencia por la que atraviesa el país. El único derecho que debe respetarse es el de propiedad, su carácter absoluto denota una visión del siglo xix. Los mercados liberados volverán a poner al país de pie, pensamiento de manual que desconoce cómo operan las economías modernas. En definitiva, la libertad retrasa, mientras que la Argentina avanza hacia su pasado más oscuro.
